ébano culo anal Hola, soy ingeniero Mecánico de 35 años. Mi esposa y yo nos casamos hace 6 años. Mi esposa es 10 años menor que yo y yo 10 años menor que mi suegra. El incidente que voy a contar comenzó el verano pasado cuando vi a mi suegra desnuda en el baño de nuestra casa. Desde ese día, la forma en que lo miraba, la forma en que él me miraba, había cambiado. He escuchado muchas veces de mi esposa que las cosas no son decentemente entre ella y mi suegro, que el incidente sexual casi nunca sucede decentemente entre ellos.

Mi suegra es un tipo de mujer con pechos y nalgas enormes, lo cual me vuelve loca. Me encantan las mujeres con culos grandes. Después de eso, todos fuimos a nuestra casa de verano. Mi esposa tiene dos hermanos menores. Como no me gusta mucho ir al mar, mi esposa llevaba a los niños e iba a la playa, y mi suegra y yo solíamos quedarnos solos en casa. Mientras tomaba el sol en el balcón y bebía cerveza, mi suegra estaba ocupada con las tareas domésticas y la comida.

Un día, cuando estaba solo de nuevo, salió al balcón y dijo que sudaba mucho y que se iba a duchar y fue al baño. después de 5-10 minutos, no pude soportarlo y fui a observarlo a través del ojo de la cerradura. Mi suegra se masturbaba justo enfrente de la puerta con una mano en el coño y otra en los pechos. Mi polla se puso erecta al instante, me bajé los pantalones cortos y comencé a tirar. Unos minutos más tarde, había eyaculado frente a la puerta cuando ella tuvo un orgasmo, temblando en silencio. Dejé mi esperma específicamente allí y fui al balcón y continué bebiendo mi cerveza. Aunque era de noche, él estaba pensando que debería apagar el fuego con mi esposa, mi polla casi nunca bajó.

De todos modos, salimos alrededor de las 23:00 de la noche y le dijimos a mi esposa que saliera a caminar un rato. Justo cuando salté al auto, conduje hacia el bosque. Me bajé los pantalones cortos y se los metí en la boca a mi esposa. Conducía y lamía mi polla al mismo tiempo. Tiré el primer correo al volante. Detuve el auto en un lugar salteado en el bosque e inmediatamente bajé y comencé a desnudar a mi esposa y lamerla.La hice tener un orgasmo acostándola en el capó delantero y lamiéndole el coño. Después de que la habitación quedó vacía, tomé sus piernas sobre mi hombro, las coloqué en su coño y comencé a bombear. Pronto los dos estábamos vacíos, pero mi fuego aún no se apagaba.

Le dije que iba a follarlo por el culo y lo metí boca abajo en el auto. Al principio, objetó que ninguna crema dolería, pero vio que no tenía intención de parar, aceptó impotente. Escupí mucho la polla y el culo y lo coloqué hasta la raíz. Mi esposa literalmente gritaba de dolor. Cuanto más gritaba, más rápido comenzaba a golpear. Me follé a mi esposa por el culo durante unos 15 minutos tanto con los gritos de mi esposa como con la adrenalina que me daba el miedo a quemarme. Vertí mi esperma en él y me relajé. Nos vestimos, fumamos un cigarrillo y nos fuimos a casa sin hablar de nada.

Cuando nos fuimos a la cama con todos a dormir, mi esposa preguntó por qué tenía tanto calor. Pensé en esas personas en el baño de nuevo, y dije que no había ninguna razón, y empezamos a hacer el amor de nuevo. Estoy seguro de que mi suegra escuchó los sonidos que hicimos.

Me desperté un poco tarde al día siguiente. No había nadie en la casa excepto mi suegra. Mi esposa tomó a los niños y se fue a la playa. Mientras estoy desayunando, mi suegra dice: “¿Por qué te despertaste tarde hoy? Eso es algo bueno”, dijo. Cuando le dije que estaba demasiado cansada por la noche, él sonrió y se alejó de mí. después de 1-2 horas, vino a verme al balcón y me dijo que limpiaría la despensa, que me llamaría mientras cargaba artículos pesados y fue a la despensa. Un poco más tarde, él me llamó, lo llamó a él. Movimos un saco pesado. Olvidó agachar la cabeza al salir por la puerta, golpeó la puerta con la cabeza y se desplomó en el suelo.

Inmediatamente lo tomé en mis brazos y lo llevé a la cama, traté de mantenerlo sobrio. Froté su cabeza, cara, cuello, garganta con colonia. Pero él no estaba sobrio. Mientras te ponía la colonia en el cuello, mi brazo comenzó a tocar tus senos. Pero por error. Como sus pezones no llevaban sostén, mi polla comenzó a levantarse cuando tocó mi brazo como un grano de nuez. Tenía miedo de que se pusiera sobria, así que le subí la camiseta y le saqué las grandes tetas. Lo estaba acariciando suavemente, asustado. Cuando todavía no estaba sobrio, comencé a lamer suavemente. Estaba completamente fuera de mi mente. Bajé las escaleras, le subí la falda y comencé a oler y besar su coño sobre sus bragas.

Ahora se me estaba yendo de las manos, le bajé bien las bragas y comencé a lamerle el coño como loca. Todavía no hubo reacción. Pero mientras lamía, el agua fluía como torrentes de su coño, los lamía y se los tragaba a todos. Decidí meterme en eso antes de ponerme sobrio y meterlo en su coño a fondo. Estaba a punto de enloquecer, no pude soportarlo durante 2 minutos y me retiré y eyaculé, pero mi polla aún no bajaba. Empecé a lamerle el coño de nuevo. Y no descuidé separarle bien las piernas y lamerle el ojete. Empecé a pensar que si la follaba por el culo, ¿se recuperaría del dolor? Porque al final tuvo que ser deshonrado.

La metí de nuevo en su coño, hice que mi polla resbalara bien, tomé sus piernas sobre mi hombro y las puse contra su ojete. Empujé un poco, miré, no se pone demasiado apretado, me di por vencido para que ella no se recuperara, comencé a golpearle el coño en esa posición nuevamente. Mi cintura no sabía venir. Supongo que bombeé durante 15-20 minutos. Pronto me sorprendió porque mi suegra estaba gritando, temblando y teniendo un orgasmo. Para mi sorpresa, olvidé sacarle la polla y eyaculé dentro. Estaba oficialmente conmocionado.

Mi suegra abrió los ojos, me besó suavemente en los labios y me dio las gracias. dijo que tuvo un orgasmo follando por primera vez en 10 años, me jaló a su lado y me acostó. Después de descansar un poco, se puso encima de mí y comenzó a lamerme por todas partes, bajó y lamió mi polla, y luego dijo que tengo un don para ello. Me puso de pie y se acurrucó frente a mí: “Te estoy dejando hacer lo que no podías hacer en este momento, tomar la crema sobre la mesa, follarme el trasero, que tu suegro nunca ha podido follar”, dijo.

Me unté bien la polla con crema y poco a poco comencé a meterme en su culo, que nunca había sido follado, ella gritaba cuando entré. Entré y esperé un rato a que se acostumbrara. Él mismo comenzó a insertar y quitar las caderas en un movimiento de ida y vuelta. Cuando me acostumbré, crecí mucho y comencé a bombear con todas mis fuerzas. También estaba acariciando su coño desde abajo con una mano. Ella no pudo soportarlo mucho y comenzó a tener orgasmos. Como no aparecí, la saqué y tomé sus piernas sobre mi hombro y se las metí de nuevo en el culo. Literalmente estaba gritando como un perro rabioso ahora.

Y exploté en…

Nos vestimos, salimos al balcón, empezamos a hablar. Me vio espiándolo en el baño. Limpió el semen en la puerta con sus bragas y se vistió. También escuchó los sonidos de hacer el amor con mi esposa por la noche desde afuera de la puerta y se masturbó. Ella realmente se desmayó hoy también, pero volvió en sí mientras yo le lamía los senos, pero no lo mostró.